8 usos de la miel de abeja

Durante años miles de años, la miel abeja ha sido utilizada para combatir diversos problemas de salud e incluso de belleza. Resulta que este producto tiene numerables beneficios que lo hacen un excelente remedio natural.

La miel de abeja es rica en nutrientes, tiene antioxidantes, ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares, hidratar la piel y reducir el colesterol.

Muchos otros de sus beneficios puedes conocerlos leyendo en este artículo de Nutrición sin más. Acá mostraremos siete usos de la miel de abeja que te harán querer incluir este producto en tu cotidianidad.

1.   Limpia la piel

La miel de abejas cuenta con propiedades humectantes y antioxidantes que la hacen un excelente producto natural para limpiar profundamente la piel.

Para aprovechar este producto de las abejas y limpiar tu rostro, puedes aplicar semanalmente una mascarilla de miel y avena.

Con esta limpieza económica y sencilla lograrás una piel fresca y libre de impurezas. Eso sí, recuerda sólo exfoliarte la cara una vez a la semana para no afectar tu cutis.

2.   Reduce el acné

El acné ciertamente puede ser causado por factores hormonales. Sin embargo, también aparece debido a agentes bacterianos.

La propiedad antibacteriana de la miel ayuda a combatir los granos, pues elimina los microbios causantes de este problema.

Para tratar el acné con miel de abejas, puedes aplicarla en la zona exacta o en todo el rostro, dejándola reposar por unos 20 minutos.

3.   Endulza sanamente

Se ha demostrado durante los últimos años que la azúcar puede ser nociva y adictiva para la salud. En la búsqueda de alternativas para endulzar alimentos, se ha comprobado que la miel es una opción sana que no altera de gran forma los niveles de azúcar en la sangre.

Ya sea por prevención o por condiciones médicas, se puede sustituir la azúcar por miel de abejas para endulzar bebidas como jugos naturales, té o café.

Es importante señalar que siempre se debe elegir la miel más pura que haya en el mercado. Mientras menos procesada sea, más sana será.

4.   Trata la tos

La dulzura y suave textura de la miel, además de su alto contenido antioxidante y antibacteriano, pueden ayudar a combatir el dolor de garganta y la tos de una manera natural.

Una forma de aprovechar la miel de esta forma es diluyéndola en agua caliente con zumo de limón. Incluso podrías simplemente tomar dos cucharadas de miel unas tres veces al día para aliviar estas afecciones.

5.   Alivia el insomnio

La miel también puede tratar el insomnio, pues los niveles de azúcar que contiene producen serotonina, una hormona asociada al equilibrio de nuestro estado de ánimo.

Cuando se sufre de insomnio, la salud se puede ver perjudicada. No sólo las horas de sueño ayudan al cuerpo y a la mente a descansar, sino también regula el apetito y tu sistema inmunológico, entre otras cosas de las que puedes conocer más leyendo en este artículo.

Tomar varias cucharadas de miel distribuidas a lo largo del día o un vaso de leche tibia con miel en la noche, contribuirá a conciliar el sueño sin efectos adversos.

6.   Hidrata el cabello

Nuevamente, el carácter humectante de la miel trae beneficios. Este producto natural puede ayudar a mantener el cabello sano y suave.

Hay diversas maneras de utilizar la miel para nutrir tu cabello. Una de ellas es añadiendo una cucharada de miel de abeja al champú que regularmente usas y mezclarlo bien.

Sin importar el tipo de cabello que tenga una persona, se puede hacer esto para para darle más vida y manejabilidad.

7.   Reduce grietas en los labios

Las propiedades de la miel también pueden ayudar a hidratar los labios y quitar las grietas.

Si tienes los labios resecos, al exfoliarlos notarás una mayor suavidad en ellos. Sólo necesitas mezclar un poco de azúcar y miel para obtener tu exfoliante de labios natural. Luego de aplicarlo frotando los labios, déjalo actuar por diez minutos y retíralo con agua.

8.   Evita enfermedades cardiovasculares

Los mismos antioxidantes de la miel pueden ayudar a disminuir la presión arterial los niveles de colesterol en la sangre. Estos dos problemas son altamente asociados a enfermedades cardiovasculares. Es decir, consumir miel ayuda a prevenir estas afecciones.