3 claves para vivir en modo FAF (Felicidad, Abundancia y Facilidad)

Esa frase es uno de los pilares de la filosofía CRP (Círculo de Realización Personal), el cual es un pequeño curso -por llamarlo de alguna manera- de crecimiento y autoayuda. A las personas totalmente involucradas en él no les agrada especialmente la idea de que le llamen de esta forma, sin embargo, yo diría que es la manera más exacta de resumir lo que son. Sin quitarle mérito, debo agregar.

El Círculo de Realización Personal lo conforman 6 clases, un por semana. Cada una tiene un tema específico con su respectiva tarea que debes empezar a hacer durante la semana y mantener por el resto de tu existencia para obtener el máximo resultado, el cual es “vivir en modo FAF”, estas son las siglas para Felicidad, Abundancia y Facilidad. Si tú también quieres vivir de esa manera, o al menos en la primera categoría, aprende cómo vivir feliz.

Desde mi punto de vista, la filosofía CRP es muy interesante, aunque me considero estar bastante lejos de ser una de sus más fervientes admiradoras, quienes basan su vida completa en las enseñanzas del creador de CRP, Francisco Giménez. Aun así, la mayoría de sus elementos son bastante útiles si se les sabe sacar el provecho necesario.

Uno de los aspectos que más llamó mi atención entre todo lo que dijeron llegó en la segunda o tercera semana. La entrenadora (como llaman a los facilitadores de la información) nos puso como tarea a todos los asistentes a repetir la frase “estoy donde estoy y estoy bien” todos los días al despertarnos durante la próxima semana y compartir nuestros resultados durante la sesión.

Al principio no comprendí mucho por qué debíamos decir esta letanía todos los días al abrir los ojos, sin excepción, pero la entrenadora nos dio una explicación bastante convincente, la cual encontrarás a continuación, junto con algunas apreciaciones personales adicionales:

-Todo es temporal: uno de los aspectos que hacen a esa frase tan poderosa es todo lo que puedes encontrar en ella al empezar a desglosarla. Estoy donde estoy y estoy bien es un recordatorio a lo que estás viviendo en este momento de tu vida, que quizá puedas considerarlo complicado, tumultuoso, pero esta frase te devuelve la esperanza de que todo por lo que pasamos es temporal, por lo que no debes sucumbir ante la desesperación, sino tratar de superar los obstáculos sabiendo que no son permanentes.

Nada dura para siempre, y aunque esta información puede traer cierta incomodidad si te encuentras en un momento de tu vida que quisieras perpetuar, esa frase te recuerda disfrutarlo al máximo.

-A todo se le puede ver el lado positivo: la última parte de la frase “y estoy bien” debe decirse con convicción, cuando lo haces vendrán a tu mente todas las cosas que tienes en tu vida que te hace estar bien: estás vivo, la salud, las personas que te rodean, tu empleo, el lugar donde vives, el hecho de poder vivir en libertad cuando hay tantas otras personas sufriendo a causa de eso, entre otras.

Aférrate a las cosas positivas que tienes, concéntrate en ellas. No pienses en tus carencias sino en la abundancia de lo que posees y siéntete genuinamente agradecido por eso. Ese pensamiento atraerá más cosas buenas hacia ti a diferencia de cuando te enfocas en lo contrario.

Muchas veces cuando las personas tienen dificultad para fijarse en las cosas buenas que tienen (no solo externas, sino cualidades propias también) es porque tienen una percepción propia bastante pobre. Si tú eres de esos a quienes se le dificulta encontrar sus propias virtudes, mira en Gananci cómo levantar tu autoestima.

-Cada vivencia tiene un propósito: además de todo lo anterior, decir “estoy donde estoy y estoy bien” te recuerda que, aunque te encuentres en un momento oscuro, todo tiene una razón de ser. Puede que aún no la hayas encontrado o no sepas cuál es el propósito por el cual te encuentras allí, pero si estás abierto a las posibilidades y no opones resistencia, podrás descifrarlo y aprender de esa experiencia.